Este diseño homenajea a Rosalind Franklin, la científica cuya mirada precisa y trabajo con la difracción de rayos X fue clave para revelar la estructura del ADN. El retrato central, sereno y firme, está rodeado de elementos inspirados en la icónica Fotografía 51 y los patrones moleculares que ayudó a descifrar. Una pieza que recupera su lugar en la historia de la ciencia, celebrando no solo su aporte decisivo a la biología molecular, sino también su integridad intelectual y su pasión por la investigación. Pensado para quienes valoran la ciencia con profundidad, el reconocimiento justo y la inspiración que nace del trabajo riguroso. Este diseño fue realizado por la ilustradora uruguaya Estela López.